Alguien que ve la vía, practica la vía
El Paramita de la sabiduría, Prajna o Chie en japonés, es representado en varias tradiciones del Budismo por un sable de doble filo que corta toda confusión. Este sable de la sabiduría es un sable de doble filo porque representa tanto la sabiduría del reconocer como la del ver. El reconocer la emociones y transcenderlas y el ver las opiniones antiguas y condicionadas y transcenderlas.
En los Sutra esta dicho que los otros cinco paramitas son como cinco corrientes que embocan en el mar de la sabiduría. Chie es entonces la sabiduría en la que todos los otros paramitas se funden y que hace que todas las imaginaciones conceptuales sean cortadas a través de la acción justa del Bodhisattva que no discrimina entre esto y lo otro. Al transcender las emociones, al transcender nuestras opiniones podemos ver las cosas tal y como son.
En nuestra práctica cantamos todos los días después de Zazen el Maka Hannya Haramita Shingyo:
Kan ji zai bo satsu. Gyo jin han nya ha ra mi ta ji. Sho ken go on kai ku. Do is sai ku yaku.
Avalokiteshvara bodhisattva a través de la práctica profunda de la Gran Sabiduría comprende que los cinco agregados son sunyata y gracias a esta comprensión libera a todos los seres del sufrimiento.
Los cinco agregados, los cinco skandhas, son las formas, los sentimientos, las percepciones, la voluntad y la conciencia. Porque nos apegamos a los skandhas el ser humano sufre. Pero por medio de Zazen el Bodhisattva practica la gran sabiduría y puede ver de esta manera que los skandhas son sunyata, que no tienen substancia propia. Algo aparece y luego desaparece. Si no nos apegamos, si no lo tocamos con los pensamientos, simplemente pasa y nada surge de ello. Se puede observar la impermanencia; que todo viene y que todo se va y que la esencia de todo es sunyata. De esta manera el Bodhisattva se libera y le puede ayudar a los demás. Aunque el Bodhisattva se mantenga en las apariencias, no se deja atrapar por la actividad de los cinco skandhas. A partir de esta práctica podemos ver con claridad que el karma es provocado por los cinco skandhas. La sabiduría comprende el karma y a través de esta comprensión surge un espíritu sin limitaciones, sin apego, libre.
La sabiduría del Bodhisattva puede ser realizada solo a través de la práctica de Zazen y es esta la principal razón por la cual el maestro Dogen siempre recalcaba que la práctica y la iluminación son dos caras de una y la misma cosa. En el capitulo Bendowa del Shobogenzo el maestro Dogen dice:
“Pensar que la práctica y la iluminación no sean uno, es una visión herética. En las enseñanzas del Buda Dharma, la práctica y la iluminación son uno e iguales. Al ser esta la práctica de la iluminación, la práctica de la Vía de los principiantes es en si la iluminación entera e original. Por eso cuando se dan instrucciones sobre la actitud mental de la práctica se dice que no deberías esperar obtener la iluminación. Esto porque la práctica en si es la iluminación realizada. Al ser la iluminación de la práctica, la iluminación es infinita; al ser la práctica de la iluminación, la práctica no tiene comienzo.
Así es como tanto el Tathagata Shakyamuni y el venerable Mahakasyapa fueron recibidos empleados por la práctica, que existe en el estado de la experiencia. El Gran Maestro Bodhidharma y el sexto maestro ancestral chino Eno, se sintieron atraídos e impulsados de igual manera por la práctica que existe en el estado de la experiencia. Los ejemplos de todos aquellos que permanecieron y mantuvieron el Dharma de Buda son así. La práctica que nunca está separada de la experiencia ya existe: habiendo recibido afortunadamente la transmisión directa de una parte de la sutil práctica, nosotros que somos principiantes en búsqueda de la verdad, poseemos de manera directa, en el estado sin intención, una parte de la experiencia original. Recuerda, para evitar que contaminemos la experiencia que nunca esta separada de la práctica, lo que los patriarcas budistas nos han enseñado en forma repetitiva, es el no ser negligente en la práctica. Cuando olvidamos la sutil práctica, la experiencia original ha llenado nuestras manos; cuando el cuerpo deja atrás la experiencia original, la sutil práctica opera en todo el cuerpo”.
Hola Carmen. Muchas veces, al reconocer como todo esta interconectado entre si nacen naturalmente la empatía y la gratitud. Muchas gracias también a ti. Gassho.
gracias