Entrar en la Vía no es difícil, pero no hay que amar ni odiar, ni elegir ni rechazar. Basta con que no haya ni amor ni odio para que la comprensión aparezca, espontáneamente clara, como la luz del día en una caverna – Kanchi Sosan
Una crisis social expone todas las caras de una sociedad. Por una parte por ejemplo la cara solidaria en la cual todos ayudan a todos y por otra parte la cara del dolor y el resentimiento de aquel que esta sufriendo. Pero como todo, tambien una crisis esta expuesta a la impermanencia, y la depresion y el miedo con el tiempo comienzan a dar lugar a la esperanza. Así, volvemos a y reencontrarnos con la fuerza para levantarnos y volver a comenzar de nuevo… ¿Tal vez de una manera distinta esta vez? ¿Tal vez mas unidos?
La historia de la humanidad demuestra que siempre que una crisis ha surgido a posterior la sociedad se ha vuelto a recomponer, algunos dicen reforzada ¿pero es esto asi? ¿o es que simplemente volvemos al mismo comportamiento competitivo y neurotico que nos ha venido llevando de una crisis a la otra? Sacamos conclusiones y una de ellas es: ¿si somos tan evolucionados y el desarrollo tecnologico es tan avanzado, porque vuelve el ser humano una y otra vez al mismo comportamiento?
Tal vez, porque la sabiduria, a lo que en el Budismo llamamos Prajna, no es algo que pueda ser adquirido como una mercancia, ni algo que pueda ser traspasado sin práctica. La sabiduria solo puede ser realizada individualmente y la realización requiere un esfuerzo personal incondicional de quien aspira alcanzarla, que se encuentra mas alla de la fuerza de voluntad que proviene del karma.
Que el individuo y la sociedad necesitan mas sabiduría queda claro, pero por otra parte la práctica del Zen nos enseña que debemos abandonar el rechazo y el apego, para encontrar la sabiduría. Entonces la pregunta que surge es: ¿para el bien de todos los seres, comó alcanzar la sabiduria, evitando el rechazo y el apego?
Para responder a esta pregunta, acudamos a uno de los pilares morales de cualquier sociedad moderna: la razón. Aquella razón que constituye el fundamento de toda sociedad y que representa el punto donde la libertad individual se encuentra con las obligaciones sociales. Aquella razón que puede ser descrita como la piel social del individuo, que es flexible y transparente y que representa la interacción constantemente cambiante entre el individuo y la sociedad en la que vive. Aquella razón que padece en el mismo instante en el cual nace la intención de utilizarla como un instrumento de control. Porque la verdadera razón, existe solo aquí y ahora y en realidad constituye un proceso dinámico y siempre continuo, donde incluso la crisis es solo una etapa que siempre será seguida por otra.
Siendo asi, el fundamento de la sociedad moderna, la razón, puede ser comprendido como un estado de balance – el balance en este mismo instante entre la libertad individual y la sociedad en la que el individuo vive. Y al igual que en Zazen este estado de balance se mantiene por medio de la práctica de la atencion. Nuestra plena atencion es necesaria debido a que demasiado individualismo deteriora la estabilidad social y demasiado control social sofoca la libertad individual. De esta manera podemos comprender que efectivamente, la verdadera razón tal vez no sea un concepto fijo que pueda ser institucionalizado sino que es el fruto de la práctica de la atencion de cada uno de nosotros.
Pero para volver a nuestra pregunta inicial: ¿como harmonizar la responsabilidad civil con la libertad individual? Justamente abandonando el apego y el rechazo; al abandonar el apego y el rechazo y al aceptar que tanto la responsabilidad social como la libertad individual existen juntas como dos caras de una y la misma realidad. Y desde nuestra practica de Zazen sabemos que justamente cuando esta comprension aparece, ambas categorias, la de la libertad individual como la de la responsabilidad civil comienzan a harmonizarse y compajinarse y al hacerlo dejan de existir como categorias y dan espacio a una libertad donde no existe contradiccion alguna.
Pero esta propuesta, que nace desde nuestra práctica de la atención, siempre seguirá exigiendo nuestra plena vigilancia: ¿porque que sucede si comprendemos que la libertad individual y la vida en sociedad no son una contradicción y intentemos hacer de ello algo que deba ser protegido? En ese mismo instante hemos perdido el balance ¿Porque? Porque denuevo hemos comenzado un proceso mental en el cual incluso del balance estamos intentando hacer un concepto. Por lo tanto, la verdadera razón, aquel punto donde el individuo se encuentra con la sociedad, solo existe aquí y en este instante.
Pero la sabiduría en el Budismo va mas allá del punto de balance. Si una persona, despierta a la sabiduría que no se limita al ego, uno sabrá que la realidad tanto a nivel individual como a nivel social es simplemente cooperación y paz. Pero para alcanzar esta comprensión, la práctica con cuerpo y mente es indispensable y con ello todos los conceptos e ideas intelectuales deben ser abandonadas – incluso aquellas sobre la razón, la sabiduría o el balance, porque cualquier concepto por sofisticado que sea, siempre será justamente solo eso – un concepto.
