Un solitario barco surca las aguas
bajo la brillante luz de la luna
Si vuelves tu cabeza
no verás cimbrearse los juncos
de la orilla que dejaste atras – Keizan Zenji
Ungan Donjo (Yün-yen T´an-sheng) 780 – 841
Ungan vivía concentrado solo en zazen y samu. En primer lugar practicó durante veinte años con Hyakuyo. Tras la muerte de éste, se marchó junto a Yakusan, recibió su educación y se convirtió en su sucesor.
Un día, Ungan dijo a sus discípulos:
“Ahí está el hijo de cierta familia. Si se le pregunta, no hay nada a que no pueda contestar.
-¿Cuantos textos posee? Pregunto su discípulo Tozan.
-Ni una sola palabra” respondió Ungan. Tozan volvió a preguntar:
“Entonces ¿de donde viene su saber?
– Practica día y noche sin dormir.
– ¿Podría preguntarle aun otra cosa?, insistió Tozan.
– Incluso si pudiera contestar no diría nada”.
El día de su marcha Tozan se dirigió a su maestro:
“¿Si tras tu muerte alguien me pide que pinte tu retrato que tendría que contestarle?
Dile sólo: esto es así” Tozan permaneció silencioso y Ungan añadió:
“!Examina estas palabras a conciencia!”
Segun: Bovay, Kaltenbach, De Smedt (1999): Zen. Práctica y enseñanza, historia y tradición, civilización y perspectivas. Barcelona: Editorial Kairós.
Francis Dojun Cook (2006): Denkoroku (Cronicas de la transmisión de la luz) Maestro Keizan. Barcelona: Editorial Kairós